Encuentro con una artista artividista
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El texto que sigue fue producido a propósito de la muestra homenaje a Alicia Benitez. La palabra homeaje resulta incómoda y casi inapropiada para esta ocasión, ya que Alicia está lejos de dejar de producir, reflexionar, y gestionar. Sin embargo, en agosto de 2015 sentimos la necesidad de hacer efectivo todo el reconocimiento, la admiración y el agradecimiento que siempre le tuvimos en Arte y Vida. Entonces, surgió la iniciativa de nombrarla socia honoraria y entregarle dicha mención en el marco de esta muestra.
LOS PRIMEROS ENCUENTROS
En el año 2008, el ciclo de Artes Visuales en Arte y Vida daba sus primeros pasos y Graciela Szelubsky nos ponía en contacto con una artista que parecía combinar tres elementos fundamentales: compromiso social, militancia en el arte y, sobre todo, muchísima energía.
Ella era Alicia Benítez. Con ella trasladamos las obras que conformaban su primera exposición[1] en Arte y Vida, desde su taller en la zona de Congreso, hasta Martín Coronado. Transitamos ese recorrido mitad en taxi y mitad en tren. Esa experiencia nos hizo ver que el compromiso y la militancia estaban
–y continúan- presentes no sólo en su obra, sino en la forma de encarar la vida. Así comenzó una relación estrecha que, con el tiempo y luego de varias muestras, nos llevó a entender que Alicia no podía ser menos que la madrina del proyecto.
LA VIDA Y LA OBRA
Alicia Benítez completa su formación en los años sesenta, siendo esta de corte tradicional y académica en Bellas Artes. Su contexto siempre ha sido determinante y su obra ha constituido un espacio de reflexión y denuncia. Alicia incorpora en su obra la lucha por un mundo más justo. Desde su lugar de artista, hace de su tela un dispositivo que evidencia las problemáticas que le son contemporáneas.
Pero esta pelea contra lo que parece indiscutible y establecido no sólo se da en la imagen. En su metodología de trabajo, Benítez establece reglas y normas de construcción que posteriormente necesita romper para generar nuevas imágenes. Conversando en su taller Alicia nos dice :“es como si siempre tuviera que romper las reglas”.
HOY: MÁS ALLÁ DEL MARCO
En mayo de este año la Asamblea Ordinaria de la Asociación Cultural Arte y Vida –compuesta por todos sus socios- decide nombrar Socia Honoraria a Alicia Benítez. Siendo, esta distinción, un pequeño agradecimiento por la generosidad y compromiso durante el camino compartido hasta hoy.
Estas obras son muestra de la coherencia que existe en su recorrido plástico. Con más de cuatro décadas de distancia y atravesando distintas técnicas, la búsqueda de abrir voces y generar elementos inspiradores de mundos distintos continúa presente.
Grabado, papel intervenido y lienzos sin marco, son meros soportes para ideas sobre la libertad. Libertad que Alicia busca en su trabajo cotidiano. Sin soltar las preguntas y las certezas que le permiten encontrarse y enfrentarse un mundo cada vez más volátil y denso a la vez.
Por todo esto creemos que reunirnos en torno al trabajo de Alicia es generar una nueva reunión con una militante artividista que no deja de enseñarnos como se puede pintar, dibujar y soñar un mundo mejor.
Federico de la Puente
Agosto 2015
[1] La exhibición llevó el nombre “Propuestas, Presencias y Profesías”, se llevó a cabo durante mayo del 2008. Benítez, con gran generosidad, decidió donar cerca de la mitad de las obras que constituyeron el corpus de obra.
